¿Sabes cómo cuidar las almohadillas de los perros? Esta parte de su cuerpo está en constante contacto con el suelo y cumplen diversas funciones importantes. Por ello, se les debe prestar atención y cuidados, garantizando el bienestar del peludo.


  1. Algunos datos sobre las almohadillas
  2. ¿Cómo cuidar las almohadillas de los perros?

Algunos datos sobre las almohadillas

Antes de aprender cómo cuidar las almohadillas de los perros, es necesario conocer más sobre estas. Aquí puedes leer algunos datos relacionados:

  • Son el tejido sin pelo bajo las patas, por eso están en contacto directo con el suelo.
  • Poseen una capa superficial de queratina que las hacen resistentes y duras.
  • La piel de las almohadillas es más oscura y gruesa.
  • Se mantienen hidratadas mediante las glándulas sudoríparas que poseen, por ellas transpiran y regulan su temperatura corporal.
  • Consiguen amortiguar los movimientos gracias a la capa de grasa que se encuentra debajo de la piel de las almohadillas. Con esto evitan daños en articulaciones y huesos.
  • Dicha capa de grasa también funciona como un aislante térmico.
  • La dureza de las almohadillas se va desarrollando a medida que el perro crece y aumenta de peso.


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¿Cómo cuidar las almohadillas de los perros?

Como has leído, las almohadillas de los peludos tienen muchas funciones importantes para el animal y, aunque son resistentes, también están expuestas y son susceptibles a sufrir daños. Además, es un área con muchas terminaciones nerviosas, por lo que cualquier afectación puede resultar dolorosa.

En cuanto a cómo cuidar las almohadillas de los perros, sigue estos 7 consejos:

1.    Fortalece sus almohadillas

Las almohadillas de los peludos van endureciéndose a medida que pasa el tiempo, es decir, en los cachorros son finas y suaves. Puedes ayudarle en este proceso garantizando ejercicios regulares, así como paseos por diversos tipos de superficie (tierra, césped, asfalto).

2.    Toma precauciones en verano e invierno

Las quemaduras por frío y calor son un aspecto que hay que cuidar, ninguno de los dos extremos es bueno para las almohadillas. No saques a pasear a tu compi en las horas de más calor en verano y evita suelos fríos en invierno, por ejemplo, con protectores.

3.    Cuida las zonas por las que camina

Cuando un perro pasea por mucho tiempo en una superficie abrasiva (asfalto, arena, entre otros), sus almohadillas pueden erosionarse o desgastarse. En estos casos, es mejor alternar el tipo de área en la que pasea, por ejemplo, con césped.

Por otra parte, evita a toda costa caminos o lugares con objetos cortantes como cristales, piedras, astillas, o similares. Esta parte de su cuerpo puede sufrir cortes fácilmente, los cuales deben ser atendidos cuanto antes.

4.    Mantén hidratadas las almohadillas

¿Cómo cuidar las almohadillas de los perros? Garantizando su hidratación. Esta área pierde elasticidad con el paso del tiempo, volviéndose más gruesa; además, otras circunstancias pueden agrietarlas o secarlas. Lo que puedes hacer es consultar con el veterinario por alguna pomada o producto para hidratar.

5.    Recorta el pelo de esa área

A los perros con mucho pelo entre sus dedos se les deben recortar frecuentemente, con esto se evitan nudos entre las almohadillas, así como cúmulos de suciedad o sudor que entorpecen al caminar.

6.    Revisa en busca de objetos extraños

Guijarros, astillas, vidrios, espigas y cualquier otro objeto extraño no solo puede clavarse en las almohadillas, sino propiciar la aparición de infecciones. Si notas que tu compi siente molestias, cojea o acaban de regresar de un paseo, revisa sus patas y entre el pelo.

7.    Evita que se ablanden

Cuando bañes a tu mascota, no dejes que se sumerja en el agua por más de 15 minutos seguidos. Así impedirás que sus almohadillas se ablanden y sufran daños.

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